miércoles, 13 de febrero de 2013

Irresponsabilidad Social Y Corporativa


Hay un uso perverso del lenguaje en el que es fácil caer, tanto si eres el que hablas como el que escuchas. Es un juego al  que todos jugamos pero en el que no todos tenemos la misma responsabilidad. Es una forma de hablar que encaja a la perfección con el lenguaje común y con las formas de pensar y entender la vida y el ser humano que hemos creado a base  de repetir(nos) lo que queremos oír, a fuerza de construir con nuestras palabras una realidad de falsas certezas, de límites claros, sin matices, para poder así situarnos la mayoría en el lado de lo normal, tan confundido siempre con lo correcto o con lo bueno. Y poder vivir tranquilos.  
No podemos soportarnos, no aguantamos la inevitable incertidumbre ni nuestra bendita vulnerabilidad y necesitamos crear un universo de lo anormal ajeno a nosotros  para sentirnos más seguros en nuestro autoengaño, para protegernos de nosotros mismo. Somos expertos escapistas de  nuestro self. 

Escribo esto revisitando una de las noticias que nos sorprendieron el pasado mes de diciembre: “Un hombre de 20 años irrumpe en una clase de una escuela, en Connecticut, y mata a una veintena de alumnos antes de quitarse la vida. También mueren la directora del centro y el psicólogo. Antes de asistir al centro había matado a su madre en el domicilio familiar. El tiroteo deja en total 27 muertos, 20 de ellos niños de entre cinco y diez años” 
Estos fueron los hechos, sin embargo éstas fueron las maneras en que algunos medios lo presentaron. Sin duda un buen ejemplo del uso perverso que hacen de la comunicación periodistas y expertos de tres al cuarto!!!

Por más que lo repitan, por más que las palabras insinúen que el autismo es una enfermedad peligrosa, no es ni una cosa ni otra, ni es enfermedad ni entraña semejantes riesgos. Rotundamente no. No estoy haciendo ningún acto de fe, no pretendo defender  a un grupo de personas por estar en una situación de desventaja, no estoy jugando  a ser aliado de nadie. Esas insinuadas afirmaciones son simple y rotundamente mentira.   

No trata este post de analizar el error conceptual de buscar en el interior causas fáciles, mecánicas y simplistas para explicar lo complejo o lo inexplicable. No se trata ahora de  señalar los peligros de un individualismo y un reduccionismo biologicista que en sí mismos no explican nada y que sólo sirven para adormecer nuestras conciencias, para lavarnos las manos y no aceptar la responsabilidad que tenemos ante estos hechos como padres, como hermanos, como políticos, como psicólogos, como docentes, como ciudadanos, como vecinos,… 

Casi dos meses después de ese día, quiero llamar la atención sobre dos hechos:

1. Sí parece haber un elemento común (no estoy afirmando que haya una relación causa-efecto) en la mayoría de episodios de masacres en centros escolares: Al menos 31 tiroteos y/o actos violentos en las escuelas de USA (con el resultado de 162 herido y 172 muertos) fueron cometidos por personas que estaban tomando o cesando la ingesta de drogas psiquiátricas prescritas a niñxs y jóvenes para tratar “cosas” como depresión,  trastornos obsesivos compulsivos, problemas de ansiedad social, TDAH,… En estados Unidos organizaciones como Citizens Commission on Human Rights International intentan llamar la atención sobre estos hechos y piden a su gobierno que inicie una investigación federal para estudiar los vínculos entre el consumo de estas drogas y los múltiples episodios de violencia sin sentido.

2. En su día, la Confederación AUTISMO ESPAÑA manifestó mediante este comunicado su disconformidad con las informaciones publicadas por diversos medios de comunicación. Sin embargo ¿cuál ha sido la respuesta de los colegios profesionales de psicólogos y médicos ante el último episodio de gran violencia en la escuela infantil de Connecticut? A raíz del tratamiento que la noticia tuvo por parte de algunos medios de comunicación, conociendo el paso atrás que ello implicaba y los efectos negativos que eso tiene para las personas diagnosticadas con algunos tipos de problemas del desarrollo o de “salud mental”, (y por tanto para mí , para ti o tu amigos, para tu familia o tus hijos por venir ¿O acaso piensas que estas cosas son de otro mundo y tu entorno es inmune a las cosas del vivir?) me pregunté cuál sería la respuesta oficial de organismos como el Colegio Oficial de Médicos y el Colegio Oficial de Psicólogos, al que pertenezco. 
Esperaba ver una reacción rápida e inteligente,  consecuente y comprometida, que pusiera negro sobre blanco algunos aspectos, denunciando a esos medios y esa forma de hacer noticias, dejando bien claro que el autismo no está relacionada de ninguna manera con ese tipo de actos salvajes, protegiendo a estas personas y dándoles alivio y seguridad  a muchas familias que confían y necesitan de su buen hacer y de sus palabras. A día de hoy no he podido encontrar en la red ese posicionamiento oficial. (Si alguno de los que me leéis lo habéis encontrado, no dudéis en decírmelo. Estaría encantado de retirar estas palabras y las siguientes y pedir disculpas por mi crítica y mi error)

Soy psicólogo y creo que en la psicología seria y sin complejos. Al mismo tiempo  rechazo una forma de hacer psicología más centrada en su oficio y en la “enfermedad”  que en las personas. Rechazo una forma de hacer psicología  que contribuye a perpetuar el estado de las cosas que no están bien, que elude su poder de innovación y transformación social. Necesitamos de colegios profesionales que sirvan para algo más que salir como expertos en los telediarios, para explicar sin explicar y repetir lo evidente, que ayuden a generar un enfoque diferente de lo diverso, y de lo extraño para la mayoría, un nuevo pensamiento común diferente que no demonize los problemas del desarrollo o las “enfermedades mentales”. 

Creo que muchos ilustres colegios profesionales deberían mirarse estas cosas. 

Mientras tanto, podremos hablar de estas prácticas como buenos ejemplos de IRRESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA.


Nota: Ninguna persona que esté tomando cualquier tipo de medicación psiquiátrica debe dejar de tomarla sin la supervisión de su doctor. 

2 comentarios:

  1. "Necesitamos de colegios profesionales que sirvan para algo más que salir como expertos en los telediarios, para explicar sin explicar y repetir lo evidente, que ayuden a generar un enfoque diferente de lo diverso...!

    Pero como no podemos/debemos olvidar la responsabilidad individual, con tu permiso añado un pequeño matiz a la frase final: IRRESPONSABILIDAD SOCIAL Y CORPORATIVA

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  2. Sin duda, es clave no diluir la responsabilidad de lo individual en terrenos de nadie. Me encanta ese PEQUEÑO matiz Cuanto suma a veces una simple y!!!

    Con tu permiso recojo tu propuesta y me la llevo al titulo del post.

    Gracias Isabel
    :-)

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